Una mezcla de colores cálidos en perfecta armonía con el entorno, dan vida a una de las regiones con las rectas más extensas de toda la Península, La Mancha. Sus llanos son conocidos por vándalos y visigodos y por cristianos y almohades. En sus fueros se libraron cruentas batallas donde la primacía del vencedor siempre resultaba un tanto incierta y desconcertante. Caballeros de todo tipo de Órdenes se dieron cita en esta extensa planicie cegados por la contagiosa sed de conquista y reconquista. Es por tanto esta tierra, la Nueva Castilla, una tierra de luchadores, aquella que vio cabalgar por sus sendas y mesetas, entre otros, al más noble e intrépido de los caballeros de la novela de oro. Entre rica Historia y sin molinos, las andanzas de un singular forajido hacen del rodar una de sus señas de identidad...
Entre membrillos y campos de manzanas accedo a la nueva nacional. El rastro de la impersonal autovía queda borrado por el viento...
Consigues cruzar vastas llanuras y atravesar legendarias localidades como Alhambra,...
... pantanos disfrazados de playas para el turista de fin de semana...
... y hasta al hacedor de tan singualres mares, Ruidera.
Sus frondosas lindes pertenecieron a la Orden de Santiago y posteriormente a la de San Juan, sus carreteras, del rodador más aventajado.
En la comarca del Campo de Montiel a su paso por la provincia de Albacete se encuentra Ossa de Montiel. Allí, como si del lejano oeste se tratara, todo un Saloon donde poder calmar la sed con unas frías cervezas. Fuera no hay duelos, solo calor y más calor...
La inmensidad es en esta ocasión solo para mí (egoísmo puro y duro)...
... pero que a El Bonillo se le amplíe y acreciente de nuevo dos terceras partes de dos leguas vulgares que hay hasta el mojón de Villarobledo...
... y que El Robledo, en las inmediaciones del Parque Nacional de Cabañeros, lo vea.
A la localidad de Alcaraz se puede llegar después de unos kilómetros de angosta carretera y plantel de vistas requetevistas.
Los restos del Castillo de origen musulmán junto al cementerio, presagio de algo fatal...
... o simplemente algo grandioso.
Es observando la Iglesia de la Santísima Trinidad del siglo XV cuando uno se da cuenta de su singular facha, aunque si de belleza tratamos, casi tanto como la propia Castilla.
Antaño torre de vigilancia...
... antaño fortaleza milenaria que aun persiste oteando el horizonte.
Uno se siente a gusto con el entorno, la percepción de todo lo que te rodea y abraza se vuelve muy íntimo y personal...
... como la Torre de Gorgojí frente al Cortijo de Pradogallo. Data del siglo XII y se encuentra parcialmente derribada. Como siempre y en lo referente a su restauración, "los unos por los otros y la casa sin barrer". Dedicado a quien competa, gañanes!.
Del sol de Villanueva de la Fuente...
... al trajín de Albadalejo. Curiosos y atentos permanecen sus personajes sin ni siquiera alterarse a mi paso. A eso le llaman ausencia de preocupaciones, lo demás mariconadas.
Montiel fue escenario de un enfrentamiento bélico denominado la Batalla de Montiel. Su Castillo del siglo IX el protagonista en toda regla.
Las andaduras en moto al igual que la Historia resultan de naturaleza cíclica, por eso pasado Villanueva de los Infantes...
... unas familiares tinajas me ponen en antcedentes.
La Solana nace como otras tantas villas de La Mancha, fruto de la repoblación efectuada durante el siglo XIII, alentada por las Órdenes Militares a las que fue donadas el territorio tal y como se recoge en las Relaciones Topográficas de Felipe II.
Lo mismo ocurre con Manzanares donde su poderosa fortaleza del siglo XIII es hoy en día refugio para paladares exigentes y pendencieros de puño fácil ja, ja...
... pero eso es otra historia... HASTA LA PRÓXIMA!.